lunes, 25 de junio de 2012

(Cáp 1) La marca



-Ya era hora que lo supieras
-¿Esto? Estás mal de la cabeza
El anciano rabió por lo bajo, murmuro un par de groserías en latín, su idioma natal, luego las repitió en otras lenguas sin siquiera percatarse de ello, le eran tan naturales unas como otras y algunas veces su mente senil olvidaba en que lengua estaba dialogando y se lo recordaban las arrugas en la frente de sus interlocutores. Esta oportunidad no fue la excepción. Cuando se dirigió a Ian nuevamente su entrecejo se frunció y su cara de perplejidad dejó claro que no entendía de qué hablaba
 -Ya de por si la historia es demasiado extraña para saberla en español, pero no tengo ni idea de estás tratando de decirme en… ¿Eso era italiano?
-Alemán, Alemán – repitió – haces que pierda la paciencia, que otra explicación puedes darle a todo esto entonces
-Tiene que haber alguna que sea lógica, siempre la hay
-Esta vez no, te conozco desde tu nacimiento, siempre llevaste la marca
-¿Llamas a esto una marca? Como si fuera una insignificante mancha o lunar ¿Marca?
-Es la marca del jinete
-Maldita marca, me ha arruinado la vida ¿Tienes idea de la vergüenza que pase cada ves que fui a la piscina a mis clases de nado? ¿A la playa? Maldición hasta las muchachas se apartaban de mi cuando la descubrían
El pobre hombre acarició su barba, no había duda que aquello debía ser cierto, conocía al muchacho tan bien como la palma de su propia mano, y no pudo evitar mirar con el rabillo del ojo la esquina superior de la marca que sobresalía de su camisa medio desprendida, Ian lo notó y se enfureció
-¿Quieres verla de nuevo?
Sus manos arrancaron dos botones de la camisa y la huella de su destino quedó a descubierto, ligeramente al lado izquierdo de su pecho, justo sobre su corazón, similar al bolsillo de una camisa en forma y tamaño, auque algo mas redondeada, de un color ligeramente dorado, y lo más extraño de todo, de un aspecto fríamente metálico. Daba la impresión de que el joven había recibido algún tipo de operación cardiaca y eso no fuera más que una pequeña protuberancia metálica como recordatorio, pero Ian desde su nacimiento no recordaba haber estado jamás en un hospital, ni siquiera por un resfrío.
-Cúbrete, no necesito verlo. Y aunque no quieras creerlo eso – y señaló con su dedo algo tembloroso el pecho del joven – es la marca del jinete
-Y otra vez la historia del jinete…
-Calla de una vez, yo, como mi padre, y el padre de este a su vez somos los guardianes del jinete, cuidamos de ti como lo hicimos de tu madre y del padre de esta desde tiempos inmemoriales. Nuestro libro de las profecías es muy claro respecto a la marca del jinete, aparecería en un niño cuando el dragón dorado saliera de su huevo.
Buscó en un atril un libro que llevaba años sabido de memoria, recorrió varias páginas y le mostró una imagen de un muchacho muy similar a él mismo, con una clara marca muy similar a la suya en el pecho, en la pagina contigua se apreciaba la prominencia de una cueva en una montaña, dentro los cascarones roto de un huevo y a uno de los lados una criatura muy similar a un dragón, según las descripciones fantásticas que Ian conocía desde su tierna infancia…
-¿Y que hay con eso? – increpó señalando el libro como si no fuera más que una historieta de tiras cómicas, el pobre anciano exasperado gesticulo nuevas maldiciones, Ian solo entendió las pocas dichas en latín, los idiomas nunca habían sido su fuerte, pero el latín lograba pronunciarlo y entenderlo sin ningún esfuerzo.
-Debería darte una buena bofetada por hablar así del Draco Santorum, pero te perdonaré la impertinencia por esta vez, comprendo que es difícil asimilar todo esto de una sola vez, pero esta noche cuando la luna esté en su punto más alto cumplirás los 17 años y tu dragón alcanzará la mayoría de edad. Y romperá el nexo entre los dos mundos y toda la humanidad estará en peligro
-¿Un dragón es mayor a los 17 años?
-¿De verdad nunca tu madre te dejó a leer el Draco Santorum verdad? Tú dragón no es de este mundo, o de esta dimensión, sinceramente nunca lo e terminado de comprender, pero en su mundo pasan 10 años por cada uno en la tierra.
-Me tiene eso sin cuidado ¿Porque tendría que ponerse en riesgo la humanidad por este dragón? ¿Porqué él querría dañar la tierra?
-No es el dragón, él es el guardián de su mundo como tú lo eres del tuyo, y ambos son los guardianes de la paz entre ambos. Pero la profecía indicaba para el segundo milenio de la tierra, según el calendario cristiano, el nacimiento de un poderoso mago oscuro que intentaría tiranizar ambos mundos y doblegarlos bajo su magia tenebrosa.
-¿Debo enfrentar un niño que no tiene ni 12 años?
-No subestimes nunca a tu enemigo muchacho ¿No has visto la realidad de nuestro mundo en la noticias? Los terremotos, maremotos, erupciones volcánicas, inundaciones, tempestades…. ¿Crees que casualmente la naturaleza se volvió loca en lo últimos diez años? Son los reflejos de aquel mundo en el nuestro, el poder de este poderoso archimalo ha estado creciendo en los últimos 120 años de su mundo y debe haber hecho tales estragos allí que afectan directamente todo nuestro mundo y amenazan con destruirlo en no mucho tiempo. Por eso el dragón abrirá el nexo entre las dos realidades para que puedas ir por él y regresar todo al equilibrio
-Realmente creo que estas completamente loco, ahora debo enfrentar a un anciano, me propones que viaje, no se como, a un mundo desconocido que no existe, a buscar un dragón imaginario para salvar un mundo que no conozco, y claro, la tierra de un puñado de problemas debidos al sobrecalentamiento global
El anciano se rascó la cabeza y su repertorio de groserías se extendió varios minutos, Ian sonreía detrás de él cuidándose de no ser visto, sabia que aquel hombre tenia un temperamento apacible casi todo el tiempo, pero hacerlo enojar podría ser el último error que alguien cometiera, lo había visto atravesar una pared con su puño para demostrar su habilidad y evitar una confrontación en alguna oportunidad a la salida de un bar, su forma débil y achacosa no parecía demostrarlo, pero era increíblemente fuerte, cuando quería serlo
Finalmente se calmó, fue hasta n rincón y busco una botilla que contenía un líquido azul intenso, bebió varios sorbos y regresó junto al muchacho, sus ojos azules centellaban cuando le miró fijamente.
-Se que aún es muy pronto para que entiendas todo esto, pero esta noche mientras duermas se te revelara el paradero del dragón para que puedas ir por él y entonces me creerás…
Y con cariño fraternal lo empujó hasta la vieja puerta oculta al final de la tienda de antigüedades que atendía y lo acompaño luego el corto tramo hasta la entrada, le sonrió cuando lo dejo en la calle, volvió a colocar el cartel de abierto que había quitado pocas horas antes para hablar con Ian a solas y regresó al mostrador, el muchacho no tuvo más remedio que caminar tranquilamente hasta su casa, por suerte era a solo unas cuadras, le tenia mucho cariño a Sensei, puesto que no conocía su nombre siempre le había llamado así, y esa noche mientras se acostaba en su cama completamente exhausto y tras despedirse de su madre con un beso de las buenas noches sus pensamientos volaron muy lejos de aquel lugar, en un viejo poblado en las riveras de Córdoba donde había vivido hasta hacia poco menos de dos años, y a ella, Helen, su antigua novia…
Habían salido juntos durante algún tiempo, algunas copas de más los habían conducido a ambos a su cuarto, el equipo de sonido tenía un tema algo lento para su gusto de fondo, pero que resultaba apetecible en la situación, las manos de uno se iban deslizando por el cuerpo del otro, buscando botones y desabrochándolos, fue cuando el torso del chico quedo completamente al descubierto y ella paso su mano sobre el frío semimetalico que el conocía como “la marca”
Todo el romanticismo del momento se detuvo, el siempre cuidaba de evitar exponerse en publico para no ser visto, ya se habían mudado dos veces de lugar para alejarse de las groserías que otros jóvenes le prodigaban gratuitamente por su “anomalía”, y pensaba que allí, en la afueras de Córdoba, podría pasar desapercibido aquello si no lo mostraba, y había tenido un glorioso éxito hasta esa noche en que había olvidado que estaba “marcado”
Ella quedó con el aliento cortado en su garganta, sus dedos acariciaban con temor aquella extraña cosa en el pecho de su novio, frío al tacto, suave y acerado que parecía incrustado en la piel. Quien sabe por que algo le dio miedo, murmuró que se sentía insegura y se colocó nuevamente la prendas que había perdido en la pasión arrebatada de los momentos anteriores, él, algo confundido, la acompañó luego hasta su casa y ella casi esquivó el beso al despedirse…
Al día siguiente en el colegio parecía esquivarlo, y a la salida no lo acompañó, evitó contestar el teléfono por la noche y recién al día siguiente le dijo claramente que no quería seguir con él, no sabía por que, pero se había sentido mal por lo pasado la noche anterior y entre líneas dio a entender que el había querido aprovecharse de ella, esa relación terminó aquel día… y así, de la misma manera terminaron otras tres, siempre a los pocos días de estar a un paso de la intimidad, y esto le frustraba a sobremanera…
Soñaba con ella, con el preciso momento en que acariciaba su marca como lo había revivido muchas otras veces, y como en tales ocasiones esperaba que ella se espantara como había sucedido, pero en esta oportunidad eso no pasó… los ojos de la chica se volvieron ligeramente dorados como su propia marca y el se asustó
La muchacha sonreía radiante como el nunca la había visto, toda ella parecía estar volviéndose una estatua de oro, y él se veía reflejado en los ojos de aquella chica, pero se sentía extraño, como si volara sobre unas montañas, veía un río de un extraño color azul intenso, a las orillas una frondosas arboledas que no lograba reconocer, en el horizonte parecía ocultarse no una si no dos lunas en conjunción y debajo de él una sombra…. Pero no era su sombra, era la sombra de un ave… de un…
Realmente era un dragón, los supo cuando se detuvo sobre une estanque de agua clara para beber, no deseaba hacerlo, el solo veía a través de los ojos de la criatura, y pudo ver el maravilloso rostro de un gigantesco ejemplar de dragón dorado, luego extendió dos majestuosas alas y reemprendió el vuelo para descender bastante después, tras pasar sobre algunos poblados y realizar varios giros cerrados, en un pico extraño medio cubierto de hielo, donde una protuberancia escondía la entrada de una cueva… se dirigía hacia la oscuridad cuando… despertó…
Se sentía afiebrado, una transpiración fría recorría su rostro, se llevó por instinto la mano al pecho y sus ojos se dilataron por completo al sentir, por primera vez en su vida, “la marca” con una tibieza inigualable… pero al cabo de solo unos minutos recuperó su naturaleza fría…
Estaba desconcertado, en la cocina se escuchaba el ajetreo matutino natural de su madre, algo más alborotado que de costumbre y no le fue difícil adivinar que en el horno estaría preparándose una suculenta torta para festejar su cumpleaños… el aroma lo delataba de ese modo, así que tratando de tranquilizarse se vistió apresuradamente y se deslizó hasta el baño para lavarse la cara, durante un segundo el espejo del tocador le regresó la cara del inocente animal con el que había soñado y al retroceder tropezó y se cayó medio enredado con las cortinas del baño, hubo un pequeño silencio y luego la voz de su madre se elevo preguntando si todo estaba bien
Respondió aún desde el suelo que si, y con temor buscó su reflejo, pero era completamente normal, trató de arreglar la cortina que se había zafado del tuvo arrancándose varios ganchos, y cuando terminó de asearse bajó las escaleras, como había previsto su mamá, con el delantal de flores sobre la ropa de trabajo, horneaba apresuradamente postre tras postre, le saludo con un cariñoso tirón de orejas, y lo llevó a la punta de la mesa donde lo aguardaba un vaso de jugo de naranja recién exprimido y unas porciones bastante apetitosas de pastel
Desayunó gustosamente, dio un beso a su madre y marchó para el colegio, fue una tarde normal como cualquier otra, salvo que sus compañeros le halaron la oreja, le cantaron el feliz cúmplenos durante las clases para perder tiempo y le hicieron, como de costumbre, algunas bromas con Susan, una chica muy bonita del curso, a la cual el no apartaba los ojos de arriba. El mejor regalo del día fue cuando ella le dio un sonoro beso en las mejillas por su cumpleaños y le dedicó una radiante sonrisa
Ian era un chico bien parecido, y tenía cierto magnetismo con las muchachas, no era musculoso pero tampoco un debilucho, ni demasiado alto ni demasiado bajo,  pero era bien proporcionado en cuanto a  gustos pudiera desearse, su pelo corto y sus ojos claros representaban, de alguna manera, gran parte de su atractivo, y Susan había considerado darse por aludida sobre las intenciones que el chico no había dejado de insinuar
A la salida varios fueron con él hasta su casa, otros quedaron en reunirse allí mas tarde, su madre, quien había pedido libre en el trabajo al ver que no podría terminar las cosas de otro modo, ya lo tenia todo listo.
Eran buenos muchachos, comieron y tomaron si demasiados excesos, Susan se mostró bastante halagada por los cumplidos de Ian y no dejo de hacerle algunos a su vez, todos comprendieron que las cosas aquel día terminarían bien, pero claro, era simplemente  un montón de ingenuos…
Entrada la noche, cuando la mamá de Ian se disponía a dejar a los chicos solos y retirarse a dormir tocaron el timbre, era Sensei
Ian no lo esperaba y lo invitó a pasar un poco desconcertado, ya que le había dicho entre otras cosas que no podría acompañarlo en la fiesta aquel día, pese a sus altercados ambos eran muy unidos y Sensei le había enseñado a Ian muchas cosas, muy interesantes y curiosas del pasado, la mitología y extrañas ciencias arcanas, aunque para él no era mas que fantasías y diversión Sensei se tomaba muy en serio enseñarle aquellas cosas, sin embargo aquel día iba llegar una visita desde el extranjero y no podría acompañarlo durante la celebración de su cumpleaños, verlo allí lo desconcertó, y más lo hizo cuando sus labios se separaron
-Veo que soñaste con tu dragón anoche, se nota en tus ojos, lamento molestarte en medio de tu fiesta pero necesito que me acompañes un momento
El chico quedó de piedra ¿Como podía saber el sobre sus sueños? Recién ahora recordaba las palabras que habían intercambiado el día anterior, pensaba responder que no podía dejar a sus invitados cuando su madre estaba a punto de irse a dormir, pero cuando quiso acordar, sin saber como, caminaban a la tienda del Sensei y estaba ya a punto de llegar, la puerta estaba abierta, pasaron, y junto a la barra los esperaba una niña, o eso le pareció a Ian…
-Te presento a Lissi, es mi sobrina, acaba de llegar desde Tokio – luego dirigiéndose a la niña agregó – este es Ian, tu protegido
La exclamación de incredulidad fue de ambos apagada, lo miraron como si no hubieran escuchado bien lo que acababa de decir, Lissi tendría a lo sumo 15 años, posiblemente recién cumplidos, su pelo era dorado con mechones ligeramente mas oscuros, largo por debajo de los hombros y bastante abultado por las ondulaciones, de complexión grácil y delgada aun carente de las formas de una mujer, sus ojos parecieron verdes intensos a un primer vistazo, aunque Ian supuso que no era el color correcto, pues no logró precisar bien la tonalidad en el breve lapso que la chica lo miró de arriba abajo, fue ella la primera en hablar
-Tío debe ser una broma, este muchachito no puede ser mi protegido, es solo un niño
-¿Yo un niño?-se defendió Ian- ¿Te has visto en el espejo? Seguramente aun juegas con muñecas, además no soy el protegido de nadie ni necesito que nadie me cuide
-Tío tiene que ser una broma, él no puede ser el jinete, se ve en sus ojos que ni siquiera ha leído en su vida el Draco Santorum, no debe conocer ninguna habilidad espiritual, es solo un muchachito común
Ian estaba comenzando a ponerse de mal humor, era su cumpleaños, por poco el Sensei lo había secuestrado de su fiesta para exponerlo a las impertinencias de esta niña mimada, así que acortó en pocos pasos la distancia y señalándola con el dedo dijo fuerte y claro
-Quédate tranquila niñita, si e leído o no ese libro es cosa mía
Fue todo lo que la joven podía soportar, levantó su mano como si fuera una garra y la dirigió al muchacho, varios hilillos de luz como si fueran chispas eléctricas de un hermoso color azul brotaron de sus dedos y sujetaron al muchacho como cuerdas, en cosa de un segundo lo levantaron en el aire y lo arrojaron contra una pila de trastos viejos que Sensei tenia en un rincón… el pobre anciano se apuró a socorrer al muchacho que estaba totalmente desconcertado
-Lissi como se te ha ocurrido usar tus habilidades con el jinete, eres su protectora y por poco lo matas
-Pero tío no puede ser el jinete si no se hubiera sabido defender
-Como demonios a hecho eso – preguntó Ian sujetando la mano de Sensei, y sintiendo aun aquella cosa caliente que le había estrujado y quemado el cuerpo
-A sido una proyección simple de su energía espiritual muchacho, Lissi esta entrenada para ser tu guardiana cuando viajes a buscar a tu dragón
-¡¡Pero es una niña!! – protestó Ian obviando de momento que no planeaba ir a ningún lado a buscar nada
- Pues esta niña te acaba de dar una paliza y puede hacerlo de nuevo – exclamó la jovencita mirándole con toda la intención de demostrarle de lo que era capaz
- Ya, tranquilos los dos – exclamó enérgico Sensei – Ian te guste o no Sussi es mi sobrina y también será tu compañera de viaje y guardiana porque yo no podré ir, estará a cargo de cuidar de ti en el otro mundo, y Lissi, Ian es tu protegido te guste o no, tu deber es cuidar de él no matarlo, así que les conviene llevarse bien
-Pero Sensei
-Pero tío
-Nada de peros, no e querido dejar que se conocieran mañana de improviso cuando partan
-¿Partir a donde?-pregunto Ian
-Hoy se a abierto una brecha al otro mundo, tu dragón lo ha hecho cuando a contactado contigo, Lissi te explicará todo lo que debas saber al respecto, una vez estén de camino, Lissi se quedará conmigo esta noche, la instruiré en todo lo que pueda serles útil durante su travesía, a si, te recomiendo volver con tus amigos y acostarte temprano, mañana será el primer día de una larga aventura para ustedes dos… y por cierto, no le digas nada a tu mamá, ya me encargaré de ella cuando se hallan ido ustedes dos, no tiene caso tener más problemas
Ian y Lissi se dirigieron una mirada llena de desprecio y el muchacho abandonó la tienda sacudiéndose aun algunas cosas pegajosas que le habían caído encima al golpear los estantes, corrió mas que caminó el trecho hasta su casa donde había comenzado a preocuparse por su ausencia, la fiesta siguió aunque se hallaba distante, ni siquiera comprendió las insinuaciones veladas de Susana cuando sugirió jugar a la botella antes de irse… finalmente al cabo de unas horas se retiraron, Ian aun estaba mareado y confundido, llego como pudo hasta su cama y cayó rendido, la noche pareció escaparse en solo un segundo…

13 comentarios:

  1. Respuestas
    1. subido hasta el capitulo 8, aunque este ultimo sin limpiar de errores ortográficos

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  2. quieo otro capitulooooooooooooooooo plisssssssssssss

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  3. jaja ok, dos mas q opinen lo mismo y subo otro...

    aunque nos e si lo leen o comentan xq si

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  4. hey me tome el laburo de leerlo como que comentan porque sy?

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  5. algunso lo comentan xq si otros quizas lo leen, y como comentan el primer capitulo unicamente no se si alguien a leido el segundo, el tercero... hay 10 capitulos subidos y comentan este... :(

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    1. Yo es el único q encontré

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    2. querida arriba hay una lista de capitulos a donde accedes a los que van subidos, en este libro (a diferencia de la 7ma batalla) el se va escribiendo a medida qu ela gente pide mas capitulos

      Indice de Capitulos

      (Cáp. 00) Prólogo
      (Cáp. 01) La marca
      (Cáp. 02) La partida
      (Cáp. 03) La poderosa magia de Sensei
      (Cáp. 04) La cueva del dragón
      (Cáp. 05) La persecución
      (Cáp. 06) Tanya, la niña draconiana que los encuentra
      (Cáp. 07) Draco Santorum, un cuento de niños
      (Cáp. 08) Las pesquisas del jinete
      (Cáp. 09) El líder rebelde

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  6. Me dio risa cuando lissi y lan empesaron a discutir ;) yo quiero leer el segundo

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    1. a mi tb me gusta esa parte espero que halla spodido leer los siguientes capitulso, y si se te acaban pide mas que ire subiendo simpre que alguien tenga interes en leerlos

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  7. por alguna razon no estan los demas capitulos (no s ela razon) volvere a subirlos en breve

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